Alexandra González
- 14 ene 2020

MARS II. "El mundo está siendo destruido pero la belleza continúa bailando a nuestro alrededor"

Un hombre toca el piano en medio de una lluvia de cenizas volcánicas que caen suavemente. Ese hombre es el pianista Frederik Croene . El mundo está siendo destruido pero la belleza continúa bailando a nuestro alrededor. Mientras tanto, las cenizas oscurecen el paisaje escénico transformándolo al ritmo de la música. (Matadero Madrid, 2020).

El pasado 10 y 11 de Enero de 2020, las paredes de Matadero de Madrid acogieron el proyecto de Karl Van Welden junto con al músico Frederik Croene,

MARS II - Música para piano, pianista y ceniza automatizados.

Por aquí dejo lo que Matadero Madrid en su página cuenta sobre este proyecto que me gusta muchísimo :)

MARS II - Música para piano, pianista y ceniza automatizados ( MARS II, Música para un piano automatizado, pianista y ceniza ) es una reflexión visual y musical, un relato poético del impacto de los desastres en nuestro pensamiento, creado por un sistema visual del artista belga Van Welden (cuyas obras se han exhibido en lugares como la Bienal de Arte de Venecia 2017 o Art Basel Hong Kong2018).

En 2006, Karl Van Welden comenzó United Planets, un ciclo de trabajo visual y performativo basado en cómo la humanidad se relaciona con la inmensidad del universo. Usando los planetas de nuestro sistema solar como puntos de anclaje, busca respuestas a esta pregunta fundamental. Dentro del ciclo de Planetas Unidos, la serie MARS mide la resistencia humana a grandes fuerzas físicas. (Matadero Madrid, 2020).

Los desastres ecológicos, las crisis económicas y los ataques terroristas pesan constantemente en nuestras mentes. Sociólogos como Ulrich Beck y Anthony Giddens, identifican la sociedad occidental contemporánea como una "sociedad de riesgo" debido a su preocupación por los riesgos, centrándose principalmente en la prevención de desastres. Sin embargo, paradójicamente, los desastres que nos amenazan tienden a ser iniciados por la humanidad. En esta sociedad postindustrial, la producción de riqueza va de la mano con la producción social de riesgos. Esto tiene que ver con la forma en que se organiza la sociedad, por ejemplo. Y también existe el principio de precaución: nuestro enfoque en una determinada amenaza nos lleva a evitarla por todos los medios posibles. En este sentido, cualquier escenario apocalíptico, no importa cuán probable o improbable sea, se convierte en una especie de recuerdo, un recordatorio de nuestra mortalidad. (Matadero Madrid, 2020).